30 mayo 2006

"El Papiro de Prisses", primer código de conducta y buenas maneras

El papiro de Prisses está contenido en "Las Instrucciones de Ptahhotep", se trata de una serie de prescripciones para los jóvenes egipcios destinados a ascender en la escala social de la época, y las escribió un alto dignatario de la corte del rey del Alto y Bajo Egipto Isesi (faraón de la V dinastía) que gobernó las Dos Tierras durante un período de cuarenta años.

Las "enseñanzas de Ptahhotep" están divididas en cuatro papiros que datan alrededor del año 2500 a. C. y el papiro de Prisses fue adquirido por E. Prisse d´Avennes en Drac Abou´l Negga y está custodiado en la Biblioteca Nacional de París.

El manuscrito comienza diciendo: "El comienzo de los preceptos de las hermosas palabras que el visir Ptahhotep ha escrito para instruir a los ignorantes en el conocimiento y en el método correcto de las hermosas palabras como algo beneficioso para quien escuche y perjudicial para quien lo desobedezca".

Los egipcios se referían a la buena educación como "las hermosas palabras".

Estas son algunas de las indicaciones de Ptahhotep:

- "No te vanaglories de tu conocimiento, ni te enorgullezcas porque eres sabio. Toma consejo del ignorante de la misma forma que del sabio, pues no se ha alcanzado el límite del arte, ni hay artesano que haya adquirido su perfección".

- "Si encuentras un camorrista en su momento de acción, alguien igual a ti, que está a tu nivel, harás que se manifieste tu virtud contra él mediante el silencio cuando hable mal".

También se pueden encontrar máximas para comportarse en la mesa si se ha sido invitado por un alto dignatario....

- "Olvidar la gula y atenerse a lo que ordene el espíritu del noble que te ha invitado".

- "Si eres un huésped sentado a la mesa de alguien más importante que tú, acepta aquello que él ha hecho que sea colocado ante tus narices. No mires lo que está delante de él. Debes contemplar lo que está ante ti, pero no claves la vista en ello con repetidas ojeadas, pues arrojarse en ello es lo que aborrece el ka. No le hables hasta que te llame, pues uno no conoce lo que le desagrada. Deberás hablar cuando se dirija a ti y lo que digas debe resultarle agradable. Reirás después que él ría y le será muy complaciente".

Leer la tascripción completa de las enseñanzas de Ptahhotep.

Estudiosos de la historia de las religiones han localizado fuertes influencias de las "Enseñanzas egipcias" en la Biblia (compliada alrededor del 700 a. C.), especialmente en los Proverbios y el Eclesiastés, y particularmente en lo referente a la preparación y el consumo de los alimentos, lo cuál no es de extrañar porque las enseñanzas egipcias circularon a través del Nilo y Mesopotamia.

El "perdido o inventado" Codex Romanoff de Leonardo da Vinci

Leonardo da Vinci fue, entre 1480 y 1510, maestro de fiestas y banquetes de Ludovico Sforza, alias "el Moro", duque de Milán. Posteriormente ejerció el mismo cargo en Roma durante cuatro o cinco años, en la corte del Prínicipe César Borgia.

En en año 1981 "aparece" un libro cuyo autor es un tal Pascuale Pisapia, la obra comienza con las sigientes palabras: "Esta es la obra que yo, Pascuale Pisapia, he copiado a manos del manuscrito de Leonardo da vinci que ahora se conserva en el Ermitage de Leningrado". Al parecer, fue un personaje británico quien encontró tal obra, Jonathan Routh, y en el año 1987 surge una primera edición del Codex Romanoff cuyo autor es el Sr. Jonathan Routh y la empresa que edita el libro es William Thomsom Collection (editorial británica).

Se ha investigado acerca de Pascuale Pisapia sin encontrar rastro alguno de su existencia y en el Museo de L´Hermitage de Leningrado (ahora San Petersburgo, Rusia) siempre han negado poseer el Codex Romanoff y las notas de cocina adjuntas manuscritas por Leonardo da Vinci.

El mencionado manuscrito recogería fragmentos de los cuadernos de notas de Leonardo, con recetas de la cocina italiana del renacimiento y comentarios sobre las costumbres en la mesa de su señor, Ludovico Sforza.

El libro "Notas de cocina de Leonardo da Vinci" ya va por la 17 edición, pero y mi pregunta es... ¿existirá realmente el Codex Romanoff de Leonardo da Vinci o será, como muchos aseguran, una inteligente invención de Jonathan Routh?...

24 mayo 2006

"Los calamares del niño", por Arturo Pérez-Reverte.

El genial escritor Arturo Pérez Reverte publicaba un artículo en El Semanal, revista del Diario Ideal, titulado "Los calamares del niño".

El artículo, que no tiene desperdicio alguno, es una "particular" crítica a la mala educación, aunque las formas que utiliza nuestro escritor no son las más adecuadas, por no ser demasiado dura con él.

Reproduzco un fragmento, suprimiendo los insultos del autor:

"(...) Y al niño acaban de traerle calamares a la romana. De no ser porque su cháchara maleducada, chillona e interminable, a la que asisto impotente desde hace veinte minutos, ya me tiene sobre aviso, la manera en que ahora maneja el tenedor me dejaría boquiabierto. El pequeño ....... - nueve o diez años, insisto - agarra el cubierto al revés, con toda la mano cerrada, y clava los calamares a golpes sonoros sobre el plato, como si los apuñalara. Observo discretamente al padre: mastica impasible, bovino, observando satisfecho el buen apetito de su hijo. Luego observo a la madre: tiene la nariz hundida en el plato, perdida en sus pensamientos. Tampoco sería difícil, me digo, con la edad que tiene ya su ....... vástago, enseñarle a manejar cuchara, cuchillo y tenedor. Pero, tras un vistazo detenido al careto del progenitor, comprendo que, para hacer que un hijo maneje correctamente los cubiertos, primero es necesario creer en la necesidad de manejar correctamente los cubiertos. Y por la expresión ......., por su manera de estar, de mirar alrededor y de dirigirse a su mujer cuando le habla, tal afán no debe de hallarse entre las prioridades urgentes de su vida. En cuanto a la madre, cómo maneje el crío los cubiertos, o cómo los manejen el padre o el vecino de la mesa de al lado, parece importarle literalmente un huevo (...). Tras un eructo infantil jaleado con suma hilaridad por el conjunto familiar –después de reír, eso sí, el papi parece amonestarlo en voz baja, a lo que la criatura responde sacando la lengua y poniendo ojos bizcos– llega la paella (...)."

Yo he observado episodios similares en alguna ocasión y asombra ver la actitud pasiva de los padres ante la mala educación de sus hijos. Con la excusa de que "los niños son nerviosillos y hay que dejar que foguen", algunos padres se desentienden de ellos cuando están en sitios públicos como terrazas de verano, por ejemplo, y nada, que hay que aguantar que chillen, que les entre una pataleta, que te incordien a tí que ni conoces a la familia o que molesten al camarero harto de trabajar.... indignante.

Cada vez parece dársele menor importancia a los buenos modales y no hay que olvidar que la imagen que uno da ante los demás es nuestra "carta de presentación", así que inculquemos las buenas formas a nuestros hijos desde chiquitines si queremos que el día de mañana sean personas respetuosas y respetadas.

Al hilo de esto de la mala educación, Mª Luz Alvarez recomendaba en su Blog de Protocolo y Comunicación la lectura de un artículo publicado por Gustavo Cataldo Sanguinetty (Universidad Andrés Bello, Chile) titulado "Las buenas maneras o la moralidad de las apariencias", que creo que os puede resultar interesante.

Vatel, maestro de ceremonias y festejos.

Fritz Karl Watel (1635-1671), conocido como Vatel, que había trabajado para el Superintendente de Finanzas de Luis XIV, Nicolás Fouquet, pasó a servir a Luis II de Borbón, Príncipe de Condé como maestro de ceremonias y festejos en el Castillo de Chantilly, residencia oficial del Príncipe en Francia.

El Rey de Francia, Luis XIV, preocupado por la posibilidad de que Guillermo de Orange, al mando de las tropas holandesas, declarara la guerra a Francia, deseaba contar con el apoyo del mejor general francés, el Príncipe de Condé.

El Marqués de Lauzun, al servicio del Rey de Francia, envía una carta al Príncipe indicándole que Su Majestad aceptaría una invitación al Castillo de Chantilly.

El Príncipe de Condé, endeudado y con la pretensión de ganarse los favores del Rey con el que había tenido ciertas discrepancias en el pasado (al Príncipe le fueron confiscados el Castillo de Chantilly y todos sus bienes, aunque se le devolvieron en 1660), encarga a su maestro de ceremonias, Vatel, la planificación y gestión de la visita del Rey y su Corte.

Vatel entiende la visita del Rey de Francia como "el reto supremo", gracias al cuál podría ayudar al Príncipe de Condé a recuperar su posición en el destino de Francia.

Para facilitar el trabajo a Vatel, cocinero y maestro de ceremonias, el Príncipe pone a su servicio un ejército de sirvientes, a los que Françoise Watel tendrá que instruir para que todo salga a la perfección.

La visita duró tres días y a Chantilly se trasladaron el Rey de francia, su esposa, el hermano del Rey y miembros de su Corte, en total, alrededor de dos mil personas.

El Príncipe de Condé cedería sus aposentos al Rey, se habilitarían salas en el Castillo para alojar a los principales miembros de la Corte, y sería necesario preparar adecuadamente las mansiones del pueblo de Chantilly para albergar al resto de invitados.

Todos los preparativos correrían económicamente a cargo del Príncipe, por lo que Vatel debía hacer "encaje de bolillos" para surtir el Castillo de las viandas necesarias, cristalerías, vajillas, cuberterías y todos los elementos para satisfacer a la refinada y delicada Corte de Luis XIV y al mismo Rey Sol.

La Marquesa de Sévigne, amiga de Vatel, aunque no estuvo presente en chantilly durante los festejos, averiguó a través de Moreuil, Primer Getilhombre de Cámara del Príncipe, los detalles de la visita y describió a su hija, Madamme de Grignan, parte de la historia:

" (...) El Rey llegó el jueves en la tarde: la cacería, los fuegos de artificio, la luz de la luna, la merienda en un césped tapizado de junquillos, todo resultó tan bien como era de esperarse. Durante la cena, a causa de una gran cantidad de invitados no esperados, hubo algunas mesas donde faltó el asado: hecho que afectó terriblemente a Vatel, que lo repetía continuamente a Gourville (...)".

Los festejos en honor del rey tuvieron lugar del 23 al 25 de abril de 1671. Comenzaron un jueves y fueron tres días de intensa actividad y tensión por las dificultades que iban surgiendo, pero nuestro maestro supo organizar espléndidamente los espectáculos de ópera y danza, el montaje de los escenarios, las sesiones de pirotecnia, las comidas (cinco comidas diarias) y todas las actividades que tuvieron lugar en el Castillo de Chantilly con motivo de la visita del Rey Sol y su Corte.

El último día, Vatel había organizado una gran banquete en el que serviría pescado, llegarían por la tarde a las cocinas de palacio gran cantidad de rodaballos, muy apreciados por la alta sociedad francesa de la época. Pero el pescado no llegaba, y Vatel, sumido en la desesperación y pensando que el lamentable suceso perjudicaría su imagen y su honor, se encerró en su habitación y se suicidó.

Al final, el pescado llegó, y fue Gourville, Intendente del Príncipe de Condé quien ocupó el lugar del Gran Vatel. El banquete fue todo un éxito.

Se atribuye a Vatel la creación de la famosa Crema de Chantilly y está considerado como un gran maestro de la cocina.

____________________________________________________________

Para saber más...

Libro -Vatel y el nacimiento de la gastronomía. Dominique Michel. Editorial Favard.

Película - VATEL, dirijida por Roland Joffé y protagonizada por Gerard Depardieu y Uma Thurman.

Artículo sobre Vatel de Jaime Ariansen Céspedes.

18 mayo 2006

El Ceremonial en el Palacio de Versalles durante el reinado de Luis XIV

El Palacio de Versalles y la Corte, con su estricto protocolo, se convirtió en un símbolo del absolutismo monárquico.

En 1682 la Corte se trasladó a Versalles, que hasta 1789 se convirtió en la capital de Francia.

Estaba formada por veinte mil personas, además de nueve mil soldados acuartelados en la villa de Versalles.

Vivían en Palacio mil cortesanos y cuatro mil sirvientes.

Luis XIV impuso un rígido ceremonial dirigido a manifestar la preeminencia del soberano. El celo con el que el Rey Sol cuidaba el mantenimiento de la etiqueta era proverbial. Nisiquiera a su hermano le permitía libertades. Y si los demás estaban sometidos a una disciplina estricta, él era el primero en seguirla. Pero este riguroso ceremonial creó un ambiente a veces malsano, que explica las críticas de escritores como Saint -Simon o La Bruyère.

Ello no significa que no hubiera lugar para la relajación. Así, cuando María Teresa de Austria, la esposa española de Luis XIV murió en 1683, el propio rey llevó una vida familiar con su favorita Madame de Maintenon, de modo que solía refugiarse en los apartamentos de la dama incluso para atender asuntos de Gobierno. También había estancias especiales para sus aficiones personales como la Sala de Pelucas, la de Billar o la Sala de Cuadros.

Pero el gran momento de diversión para la Corte eran las "noches de Apartamento". Todos los lunes, miércoles y jueves, de siete a diez de la noche, de otoño a principios de la primavera, el Rey organizaba una "soirée" a la que asistían todos los cortesanos y en la que se relajaba la rígida etiqueta. El lugar de encuentro eran las salas que formaban el Gran Apartamento del Rey. Bajo las sugestivas pinturas de los salones de la Abundancia, de Diana o de Marte, los cortesanos iban de mesa en mesa, entre pirámides de frutas, copas de confitura y toda clase de bebidas. En una sala se jugaba al billar, en otra a las cartas.., y el soberano se paseaba de un grupo a otro, sin permitir que se le hicieran reverencias, conversando y bromeando con los nobles y haciendo cumplidos a las damas.

Pero el día terminaba con otro acto de adoración: la cena, a las diez de la noche. El Rey cenaba bajo la mirada de los cortesanos, que se agolpaban en la cámara y seguían con toda atención sus gestos y palabras. Algunos elegidos lo acompañaban en la última ceremonia del día, la de acostarse: Le coucher du Roy. Concluía así la órbita diaria del Rey Sol, repetida durante decenios hasta su muerte, en 1715.

Desde las seis de la mañana la guardia ocupaba sus puestos en los patios del palacio. En las "Grandes dependencias" los intendentes y empleados comprobaban el reparto de víveres y bebidas, mientras que en la cocina de la Boca se comenzaba a preparar el caldo del Rey. Los señores titulares de los altos cargos se disponían a asistir al "Pequeño Despertar del Rey" en una de las 200 estancias de Palacio.

Dentro de la etiqueta de Palacio, el momento de levantarse comportaba una ceremonia cuidadosamente reglamentada y que tenía un nombre especial: Le lever du Roi, el despertar del Rey. En invierno, el monarca se despertaba a las ocho y media de la mañana. En ese momento, el ayudante de cámara, que había dormido al pie de su lecho, le susurraba: "Señor, es la hora". Entraban entonces el Primer Médico y el Primer Cirujano para informarse de la salud regia, a la vez que daba paso a las "grandes entradas", es decir, a los miembros de la familia real. Cuando hermanos, cuñados y tíos rodeaban el lecho, el Primer Gentilhombre de Cámara descorría el dosel de la cama y le ofrecía la pila de agua bendita y un libro de oraciones, con el que el Rey rezaba un cuarto de hora. Todos, de pie y con los ojos bajos, acompañaban este breve ejercicio religioso.

A continuación empezaba, en presencia de todos, el Petit lever: el rey salía de la cama, se ponía una bata y se instalaba en un sillón, donde un barbero lo ayudaba a peinarse y, un día de cada dos, a afeitarse. Al mismo tiempo entraban ministros y otros servidores, hasta un total de unas cuarenta personas. Luego el soberano pasaba a un salón adyacente, donde tomaba el desayuno (previamente probado por un doméstico) y se vestía ayudado por los cortesanos con el cargo honorífico de asistirlo: el Primer Gentilhombre de Cámara y el Maestro del Guardarropa.
En la Galería de los Espejos los señores y las damas esperaban la llegada del Rey para acompañarle hasta la Capilla. En el recorrido hacia la Capilla, se pasaba por las "Grandes Estancias", lugar público desde que el Rey decidiera abandonarlas para ocupar sus estancias privadas. Luis XIV se paseaba custodiado por cuatro guardias y un capitán que, detrás de ellos, iba recogiendo los "plácets" (peticiones escritas) de los cortesanos. El Rey atravesaba seis salones contiguos hasta llegar a la Capilla donde, a las diez de la mañana, tenía lugar la misa.

En la Capilla, el Rey y su familia se situaban en la tribuna frente al altar y las damas de la Corte ocupaban las tribunas laterales.

En el Gabinete del Consejo, una sala de reunión de Palacio, el Rey acostumbraba a reunirse con los Ministros que formaban parte del Consejo: el canciller, el inspector general de Finanzas y algunos secretarios, como el señor de Torcy, encargado de Asuntos Exteriores, o el señor de Barbezieux, encargado de la Guerra.

En la misma sala, Luis XIV concedía las Audiencias, era el momento del Grand lever, al que asistían todos aquellos que, mediante exquisitas y complicadas maniobras, habían conseguido una licencia para formar parte de las "pequeñas entradas", un privilegio que intentaban aprovechar para que el Rey se fijara en ellos y poder obtener un favor.

"El almuerzo en privado" (Le dîner au Petit Couvert) tenía lugar en la estancia del Rey a la una. El capellán recitaba el "benedicte" y el veedor de viandas destapaba las soperas (en esta época no se acostumbraban los comedores, todos los habitantes de palacio comían en la cocina, con excepción de los reyes, que lo hacían en su habitación. Se dice que Luis XIV comía con las manos, a pesar de que ya se acostumbraba el uso de los cubiertos).

A las diez de la noche, la cena del "Gran Cubierto"(Dîner au Grand Couvert). Luis XIV acostumbraba a cenar en público, servido por gentilhombre y en compañía de su familia. Durante la cena, Monseñor y los príncipes se sentaban al lado del Rey ante los asistentes, delante de ellos, se sentaban las damas con título, y detrás de ellas, de pie, los cortesanos y curiosos. La cena podía ser presenciada por todos, pero la asitencia, debido a la escasa capacidad de la sala, era controlada por el ujier.

Cada servicio de alimentos era presentado y probado previamente por un séquito de veedores de viandas. Se presentaban en la mesa alrededor de cincuenta platos diferentes. La cena duraba alrededor de tres cuartos de hora.

Por último, el rey volvía a su dormitorio. Arodillado ante su sillón, rezaba durante otros quince minutos, ahora secundado por los nobles y clérigos presentes, entre ellos el Gran Limosnero, que dirigía la oración en voz alta.
_________________________________________________

Información extraída de "Versalles: el Resplandor del Rey Sol", publicado por Jesús Villanueva (Investigador de la Universidad Autónoma de Barcelona) en el nº 10 de la Revista Historia, y de una publicación de Béatrix Saulé, Conservadora Jefe y Directora del Departamento Cultural del Palacio de Versalles.
_________________________________________________

Luis Rodriguez Ennes, Catedrático de Derecho Romano de la Universidad de Vigo, señala en su artículo titulado "Apuntes históricos en torno a la evolución del protocolo desde la Roma Imperial hasta finales del Antiguo Régimen" lo siguiente: "El modelo de la sociedad cortesana de Luis XIV puede resultar útil para la interpretación de las ceremonias del Antiguo Régimen ya que, con las debidas cautelas, aporta una serie de consideraciones que pueden trasladarse a los comportamientos y actitudes de las instituciones urbanas, de manera que las ceremonias y celebraciones públicas adquieren un sentido y un valor más profundo que la simpre formalidad o aparato externo. La atención y el cuidado con el que se preparaban las ceremoniasy los pleitos que por su causa se suscitaban, deben entenderse como un modelo de autopresentación de las instituciones urbanas que ejercían algún tipo de poder; una autopresentación en la que la opinión del pueblo y de las demás instituciones desempeñaba un papel determinante y el poder y prestigio de cada unadependía, no sólo de su capacidad objetiva de decisión, sino del refrendo del resto del cuerpo social".

Sitios de Internet recomendados:
http://www.chateauversailles.fr/fr/311_La_journee_du_Roi.php
http://www.daysofroyalty.com

Fotografías del Palacio de Versalles

Película- "Le Roi Danse" de Gerard Corbiau.
Libros- "Les plaisirs de Versailles" escrito por Philippe Beaussant.

SS.MM. inauguran en el Real Alcázar de Sevilla la Exposición "Ibn Jaldun. El Mediterráneo en el S.XIV: Auge y Declive de los Imperios".

Al acto de inauguración, presidido por SS.MM los Reyes de España, asistirán el Presidente del Gobierno español, los Presidentes de Egipto y Argelia, y los príncipes de Jordania y Marruecos, entre otros.

Sus Majestades presidirán el acto de apertura a las 20.30 horas, junto al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, además de otras altas autoridades del Estado.

A partir de mañana, día 19 de mayo, y hasta el 30 de septiembre de 2006, estará abierto el Real Alcázar de Sevilla para mostrar al público la exposición "Ibn Jaldún. El Mediterráneo en el siglo XIV: Auge y declive de los Imperios", con la que se pretende analizar el papel jugaron la ciudad de Sevilla y el resto de España en ese período, relacionando los acontecimientos de la época con el análisis histórico que nos aporta la obra de Ibn Jaldún (1332-1406) que fue uno de los más importantes pensadores musulmanes de la época.

La exposición ha sido organizada por la Junta de Andalucía, la Fundación el Legado Andalusí, el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación, el Ministerio de Cultura, la Sociedad Estatal de Acción Cultural Exterior, el Ayuntamiento de Sevilla, el Patronato del Real Alcázar de Sevilla y la Fundación Jose Manuel Lara.

Según informó el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado a la agencia de noticias Europa Press, asistirán a la inauguración el presidente de la República Árabe de Egipto, Mohamed Hosny Mubarak, y el Ministro de Cultura egipcio, Farouk Abdel Aziz Hosny; el presidente de Argelia, Abdelaziz Buteflika; el Príncipe Faisal Ben Al Hussein y la Princesa Alia Al Faisal de Jordania; el Príncipe Moulay Rachid de Marruecos; el primer vicepresidente y Ministro de Exteriores de Qatar, Sheik Hamad bin Jassim bin Jabor Al-Thani; el secretario general de la Liga Árabe, Amr Moussa; el Ministro de Cultura de Túnez, Mohamed Aziz Ben Achour; y el Ministro de Cultura de Siria, Riad Nassan Agha. También están invitados los embajadores árabes acreditados en España.


Durante la inauguración se recorrerán seis salas: el Cuarto del Almirante, Sala Alta 1, donde se mostrará el perfil histórico de Ibn Jaldún; el Cuarto del Almirante, Sala Alta 2, donde se mostrará una presentación audiovisual de los diferentes Gobiernos del siglo XIV; Palacio Mudéjar de Pedro I, Sala 3, sobre la Sevilla del siglo XIV; la Capilla, Sala 4, literatura y pensamiento del siglo XIV; el Salón de los Tapices, Sala 5, dividido temáticamente en tres partes (Comercio y Mercancias- Guerras, Expansiones y Diplomacia- Viajes de Ibn Jaldún); y el Salón Gótico, Sala 6, donde se exponen piezas que ejemplifican la evolución del arte musulmán.

Después de la visita por las instalaciones, SS. MM. los Reyes ofrecerán una Cena de Gala en el Réal Alcázar tras la cual S. M. el Rey Don Juan Carlos ofrecerá un discurso a los asistentes.
______________________________________

19 de mayo de 2006

Ampliación de la noticia

Fuente: Casa Real.

A su llegada, Sus Majestades los Reyes fueron recibidos por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero; el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves González; el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Ángel Moratinos Cuyaubé; el delegado del Gobierno en la Comunidad Autónoma de Andalucía, Juan José López Garzón; y por el alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteserín; el Secretario General de la Liga Árabe, Amre Moussa; Sus Altezas Reales el Príncipe Faisal Al-Hussein y la Princesa Alia Al-Faisal de Jordania; Su Alteza Real el Príncipe Moulay Rachid de Marruecos; el Presidente de la República Argelina Democrática y Popular, Abdelaziz Bouteflika; y el Presidente de la República Árabe de Egipto, Hosni Mubarak, entre otras personalidades.

Tras recorrer la exposición, Don Juan Carlos pronunció unas palabras, en las que destacó el valor de la cultura como motor del progreso y de las relaciones entre Europa y el mundo árabe-magrebí, destacando que Ibn Jaldún, forma parte de la lista "gloriosa de los hombres geniales que han sido precursores, próximos o lejanos, del moderno edificio de las ciencias humanas". Agregó el Rey que España ha promovido, por historia y vocación mediterráneas, estas relaciones "como una de las dimensiones esenciales de su identidad y acción exterior", destacando que el siglo XIV, plagado de importantes acontecimientos y tragedias -como la peste negra-, "fue también el germen y el inicio de grandes avances para la Humanidad".

Posteriormente, Sus Majestades los Reyes ofrecieron una cena a los invitados en el comedor de gala del Alcázar. A su término, Don Juan Carlos y Doña Sofía fueron despedidos por las autoridades extranjeras asistentes.

17 mayo 2006

SS.MM. los Reyes de España ofrecen una cena en el Palacio de la Zarzuela en honor del Presidente de Perú y su esposa.

El martes, día 16 de mayo de 2006, Sus Majestades recibieron en la Zarzuela al Sr. Alejandro Toledo, Presidente de Perú, que acudió con su esposa, la Sra. Eliane Karp de Toledo.

El Sr. Toledo ha aprovechado para venir a España en visita privada antes de volver a Perú tras su participación en la IV Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea, América Latina y el Caribe, que se ha celebrado en la ciudad de Viena (Austria) del 11 al 13 de mayo.

El Presidente de Perú y su esposa, llegaron al aeropuerto de Málaga el domingo, donde fueron recibidos por el Sr. Armando Lecaros, embajador del Perú en España.

El pasado lunes, 15 de mayo, el Presidente del Perú inició la jornada de trabajo a las 11.30 horas reuniéndose con empresarios de la Cámara de Comercio de Málaga y posteriormente con la colonia peruana de esta ciudad. Tras los citados encuentros, el Sr. Alejandro Toledo visitó Fuengirola para encontrarse con la Sra. Esperanza Oña, alcaldesa, que le hizo entrega de las llaves de la ciudad. Ayer martes, día 16 de mayo, según la Agencia EFE , visitaría al Sr. Zapatero, Presidente del Gobierno español, con el que había quedado en entrevistarse en Madrid durante la Cumbre de Viena.

16 mayo 2006

Visita de S.S. el Dalai Lama a Barcelona en julio de 2006.


S. S. Tenzin Gyatso, líder espiritual del budismo tibetano -Premio Nobel de la Paz y Doctor Honoris Causa, entre otros títulos- estará en Barcelona los próximos días 25 y 26 de julio.

http://www.casadeltibetbcn.org/dalailama2006

La Conferencia del Dalai Lama, titulada "El Arte de la Felicidad" (prevista el día 25 de julio a las 15.00 horas) tendrá lugar en el estadio del Palau Sant Jordi de Barcelona y las Enseñanzas se impartirán en una sala anexa al Palau, la Sala Barcelona 92.

En este mismo lugar el Dalai lama impartió las Enseñanzas y la Iniciación de KalachaKra en 1994.

14 mayo 2006

V Encuentro de Responsables de Protocolo y Relaciones Institucionales de las Universidades Españolas















Organizado por la Asociación para el Estudio y la Investigación del Protocolo Universitario y patrocinado por el Gobierno de Navarra, Ayuntamiento de Pamplona, Grupo Santander y Monforte y Asociados, el V Encuentro de Responsables de Protocolo y Relaciones Institucionales de las Universidades Españolas ha tenido lugar en Pamplona los días 11, 12 y 13 de mayo.

En el Encuentro han participado como ponentes personajes muy relevantes y de gran prestigio dentro del mundo del protocolo, tal es el caso del Sr. D. Felio A. Villarubias, historiador y diplomado en protocolo, heráldica y vexilogía, y responsable de los cursos de protocolo y ceremonial de la Escuela Diplomática y la Universidad de Oviedo, que trató de forma magistral el tema del acercamiento entre las diferentes culturas a través del protocolo.

El Papa visitará Valencia en julio. -Notas sobre Protocolo Eclesiástico: Autoridades Civiles en Actos Religiosos-

El director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede ha confirmado el viaje apostólico del Papa, que estará en Valencia los días 8 y 9 de julio para participar en el V Encuentro Mundial de las Familias.

http://www.emf2006.org

Benedicto XVI protagonizará un discurso ante los feligreses el sábado, día 8 de julio, y una misa de clausura del el domingo, día 9 de julio. Sus Majestades, los Reyes de España, y el resto de la Familia Real estarán presentes en los actos centrales del Encuentro. Además, aunque aún no se ha confirmado, según la Cadena Ser, el Presidente del Gobierno, José Luis Rodriguez Zapatero viajará también a Valencia para encontrarse con Su Santidad el Papa en visita privada.

Autoridades nacionales y autonómicas se darán cita en la ciudad de Valencia para presenciar la esperada visita papal, que al parecer ha sido invitado a venir a España por SS.MM.

Está previsto que Su Santidad llegue el sábado por la mañana al aeropuerto de Manises desde donde hará un recorrido el el famoso "papamóvil" hasta la Catedral de Valencia. Tras venerar el Santo Cáliz, se reunirá con jóvenes seminaristas en la Plaza de la Virgen. Por la tarde se encontrará con Sus Majestades los Reyes y por la noche, participará en un encuentro festivo en el que pronunciará un mensaje.

El domingo por la mañana se celebrará una gran misa de clausura tras la cual el Papa volará a Roma.

NOTAS SOBRE PROTOCOLO ECLESIÁSTICO

Teniendo en cuenta que SS. MM. los Reyes de España y otras autoridades nacionales, autonómicas y locales estarán presentes en los actos principales del Encuentro, me ha parecido oportuno comentar cuál es es protocolo que aplica la Iglesia Católica con respecto a la presencia de autoridades civiles en actos religiosos.

Autoridades civiles en actos religiosos

Es un principio de la Iglesia Católica que "fuera de la distinción que deriva de la función litúrgica y del orden sagrado, y exceptuados los honores debidos a las autoridades civiles a tenor de las leyes litúrgicas, no se hará acepción alguna de personas o de clases sociales, ni en las ceremonias ni en el ornato externo". Este es el principio a partir del cual la Iglesia desarrolla y concreta su práctica litúrgica de respeto y honor a las autoridades.

Los criterios litúrgicos que deben tenerse en cuenta respecto a la presencia de Autoridades civiles en actos religiosos son:

1. Las Autoridades civiles tienen derecho a estar presentes y ocupar un lugar especial. En su colocación se respetarán las leyes vigentes "extra chorum et presbiterium".

2. La "presidencia" corresponde únicamente a los ministros sagrados.

3. Las Autoridades civiles, ya que ejercen el derecho de representación del pueblo en los actos religiosos, deberán ser consecuentes por lo que se refiere a la ejemplaridad como católicos y como ciudadanos.

La figura del Obispo se toma como eje en torno a la que giran las más importantes celebraciones eclesiásticas. Por tanto él es el encargado de recibir a las autoridades civiles en as solemnidades.

El Ceremonial de los Obispos describe así los honores debidos a la Autoridad presente en la Asamblea litúrgica:

a) "Si el Jefe de Estado o de Gobierno asiste oficialmente al Acto litúrgico, el Obispo, ya dispuesto, saldrá a recibirle a la puerta de la Iglesia, y si es católico, le ofrecerá oportunamente agua bendita, le saludará como es costumbre y, colocándose a su izquierda, le acompañará al lugar destinado fuera del presbiterio dentro de la Iglesia. Terminada la celebración, le saludará mientras se retira. Los otros ministros que ejercen el poder en el gobierno de la nación, región o ciudad, si es costumbre según las tradiciones locales, son recibidos en la puerta de la Iglesia por un eclesiástico reputado digno, el cual les saluda y les conduce a los lugares especialmente reservados. El Obispo, en cambio, puede saludarles durante la procesión de entrada y salida hacia el Altar y también cuando retorna a la sacristía.

b) En la celebración eucarística, además de estos gestos de acogida y despedida, durante el rito de la presentación de los dones para su "consagración" estos, que son expresión de la ofrenda de la Iglesia, son incensados junto con sus oferentes (el Ministro celebrante y toda la Asamblea oferente) expresándose así el honor y respeto por la ofrenda y los oferentes. Pues bien, otro de los signos de honor reconocidos a las Autoridades presentes es la incensación particularizada con tres impulsos de incensario a la Autoridad que por su oficio está presente en la celebración sagrada.

c) Un tercer momento en que la autoridad recibe un detalle particularizado de la atención de la Iglesia por su presencia, se produce cuando (según la tradición romana momentos antes de la vomunión) toda la Asamblea comparte el don de la paz del Señor resucitado. Entonces, señala el Ceremonial de los Obispos, "si el Jefe de Gobierno viene oficialmente a la celebración, el diácono o uno de los concelebrantes va a su encuentro y le da la paz según las costumbres del lugar".

Estas tres muestras de atención y respeto están cargadas de sentido cuando la Autoridad pertenece a la misma comunión católica y, en cambio, no son posibles con otras convicciones religiosas o no creyentes.

____________________________________________________

Libro recomendado: Organización, ceremonial y protocolo en la Iglesia Católica. Manuel Alfonso Díaz Bonilla. Ediciones Protocolo.

____________________________________________________

Con respecto a la presencia de SS. MM. los Reyes de España y otras autoridades civiles en los actos centrales del V Encuentro Mundial de las Familias os planteo lo siguiente:

La a-confesionalidad del Estado supone su neutralidad respecto del fenómeno religioso. Según sentencia del Tribunal Constitucional de 1982, la a-confesionalidad obliga al Estado a prohibirse "a sí mismo cualquier concurrencia, junto a los ciudadanos, en calidad de sujeto de actos o actitudes de signo religioso".

Me gustaría saber cuál es vuestra opinión al respecto. Os recuerdo que para escribir comentarios de los artículos publicados en este Blog debeis ser usuarios de Blogger y si no lo soys, podeis publicar vuestra opinión en el Libro de Visitas de la Página que encontrareis al final de la columna lateral.

Un saludo y muchas gracias,

Nerea Mestres del Peral.

___________________________________________________

11 mayo 2006

Nobiliaria: La Grandeza de España.

El emperador carlos I de España y V de Alemania creó la Grandeza de España en 1520, año de su coronación imperial en Aquisgrán.

Los antecedentes históricos de la Grandeza de España se encuentran en la Edad Media con los Ricos hombres, en Castilla y León y los Barones en Cataluña, Navarra y Aragón. Eran nobles que poseían riqueza, territorios y vasallos y todo esto les atribuía un gran poderío.

El emperador aprovecha el mismo año de su coronación imperial para dejar claro cuál era el grado de aproximación a su real persona de los nobles del reino. Así, las personas a las que otorgó la dignidad de Grande de España, tenían el tratamiento de "primos", teniendo el resto de la nobleza el tratamiento de "parientes".

La intención de Carlos V al crear la Grandeza de España fue claramente política.

En aquella época, el principal problema de los reyes era el enorme poder de las principales familias, la gran fuerza de la nobleza de sus reinos. Entonces, Carlos, en vez de actuar como los demás reyes europeos (Francia, Inglaterra..), de "darles en la cresta" para quitarles poder y acrecentar así el de la Corona, hizo justamente lo contrario.

Con su extraordinario sentido político (consciente, quizá de las viejas guerras civiles de Castilla y Aragón del siglo anterior, y de las especiales características de la realidad española, fruto de la "reconquista"), Carlos V tomó la decisión más acertada, elevándolas casi hasta su mismo nivel, para asegurar su lealtad y poder utilizarlas en servicio de la nación.

Y dio resultado, pues en los siglos XVI, XVII y XVIII, la Grandeza de España, sirviendo con lealtad y eficacia a la Corona, rindió importantes servicios a nuestro país (el gran Duque de Alba en Flandes, el gran Duque de Osuna en Nápoles, el gran Marqués de Santa Cruz en la batalla naval de Lepanto...).

Francisco López Nieto y Mallo nos habla, en su libro de Honores y Protocolo, de tres clases de Grandezas: de primera, de segunda, y de tercera clase.

- Los Grandes de primera clase (también llamados de Grandeza Inmemorial), eran los descendientes de Carlos I y no necesitaban de sanción real para suceder y hacer uso de sus títulos.

- Los Grandes de segunda clase (Grandes Restablecidos) eran también descendientes de Ricos hombres, pero no podían titularse hasta que el Rey los autorizaba para ello.

- Los Grandes de tercera clase (Grandes Creados) eran los que, sin tener aquél origen, habían alcanzado la Grandeza por concesión Real.

Según Martínez Correcher, los Grandes de primera clase se dirigían al Rey cubiertos y lo escuchaban también cubiertos (podían estar con el sombrero puesto).

Los de segunda clase podían oír al Rey cubiertos, pero tenían que descubrirse al dirigirse a él.

Los Grandes de tercera clase debían permanecer siempre descubiertos. Sólo se cubrían al alinearse contra las paredes del Salón Real en Ceremonias de Palacio.

Durante el siglo XIX se seguía un vistoso ceremonial para el nombramiento de Grandes de España que se llamaba la Cobertura.

Cuando era una señora a la que se nombraba Grande de España, el nombramiento recibía el nombre de Toma de Almohada.

El título de Duque va unido, en España, a la dignidad de Grande de España. También pueden ser Grandes de España, por Gracia Real, nobles que no posean el título de Duque, aunque esto es más excepcional.

Según los tratadistas Francisco Fernández de Bethencourt, Julio de Atienza, barón de Cobos de Belchite y Fernándo González Doria, fueron veinte las casas o familias de los reinos españoles, a las que, en total, el emperador otorgó veinticinco Grandezas, las primeras en el mencionado año de 1520:

- 2 a la Casa de Acuña (al Marqués de Villena, Duque de Escalona y al Conde de Ureña).
- 2 a la Casa de Aragón (al Duque de Segorbe y al Duque de Villahermosa).
- 1 a la Casa de Borja (al Duque de Gandía).
- 1 a la Casa de Cardona (al Duque de Cardona).
- 1 a la Casa de la Cerda (al Duque de Medinaceli).
- 2 a la Casa de Córdoba (al Marqués de priego y al Conde de Cabra).
- 1 a la Casa de la Cueva (al Duque de Albuquerque).
- 1 a la Casa de Enríquez (al Almirante de Castilla, Conde de Melgar).
- 1 a la Casa de Guzmán (al Duque de Medina Sidonia).
- 2 a la Casa de Manrique (al Marqués de Aguilar de Campoo y al Duque de Nájera).
- 1 a la Casa de Mendoza (al Duque del Infantado).
- 1 a la Casa de Navarra (al Condestable Conde de Lenín).
- 1 a la Casa de Osorio (al Marqués de Astorga).
- 1 a la Casa de Pimentel (al Conde-Duque de Benavente).
- 1 a la Casa de Ponce de León (al Duque de Arcos).
- 1 a la Casa de Sandoval (al Marqués de Denia).
- 1 a la Casa de Toledo (al Duque de Alba).
- 1 a la Casa de Velasco (al Condestable de Castilla, Duque de Frías).
- 2 a la Casa de Zúñiga (al Duque de Béjar y al Conde de Miranda).

En 1815 el rey Fernando VII aprueba el Reglamento para el Régimen de la clase de Grandes en sus Juntas Generales. El Rey Fernando VII había creado, anteriormente a este reglamento, la Diputación Permanente de la Grandeza.

Alfonso XIII dio una Real Orden de fecha 21 de julio de 1915 a través de la cuál se aprobaron los Estatutos para el Régimen de la Grandeza de España, que inicia su regulación diciendo que la forman los que ostentaren este honor con arreglo a las leyes del reino.

Por Orden de 8 de octubre de 1999, la Diputación Permanente y Consejo de la Grandeza de España, una vez obtenida la venia de Su Majestad el Rey, promovió la modificación de sus Estatutos.

Forman la Grandeza de España los que ostentaren el honor de Grande de España con arreglo a las Leyes del Reino, y son Títulos del Reino de España, quienes sin ser Grandes de España, ostenten un título nobiliario.

La relación de Grandes de España se escribe en un libro que se publica anualmente, en este libro aparecen los apellidos y títulos de cada uno de los individuos de la familia que pudieran ser llamados a la sucesión de la Grandeza.

La Asamblea de la Grandeza es el órgano supremo de los Grandes y Títulos del Reino.

La Diputación Permanente y Consejo se compone del decano, que será siempre un Grande de España, ocho diputados consejeros, elegidos entre los Grandes, y ocho, elegidos entre los Títulos del Reino.

Además del Decano (cargo que ostenta en la actualidad el Excmo. Sr. D. Enrique Falcó, Conde de Elda) en la Diputación Permanente y Consejo, existen los cargos de Vicedecano, Secretario y Tesorero.

Nerea Mestres del Peral.

BIBLIOGRAFÍA

Nobiliario español: diccionario heráldico de apellidos españoles y de títulos nobiliarios. Julio de Atienza, Barón de Cobos de Belchite.

Honores y Protocolo. Francisco López Nieto y Mallo.

Grandezas de España y Títulos del Reino. Mª Teresa Fernández-Mota de Cifuentes.

El Protocolo en los negocios. José Antonio de Urbina.

El arte del Protocolo. Fernando Fernández.

Orden de 8 de octubre de 1999, por la que se dispone la publicación de los Estatutos de la Diputación Permanente y Consejo de la Grandeza de España. http://www.boe.es/boe/dias/1999/11/03/pdfs/A38557-38558.pdf